Esta semana estoy de vacaciones, así que Alberto Rubín Martín, psicólogo y máster en Psicología de las Organizaciones y Recursos Humanos, ha colaborado escribiendo un post para el blog. Gracias Alberto, un honor leerte en este espacio. Aquí lo tenéis:
Este artículo lo escribo tras hacer una reflexión sobre las nuevas tendencias de la Psicología
hacia una visión más positiva, de respeto hacia sí mismo y hacia los demás, de
desarrollo personal, motivación y consecución de objetivos. Para leer más sobre
superación personal puedes leer este blog http://lifeder.com/superacion-personal/
Y es que, esta tendencia no ha existido siempre.
En los primeros años de la Psicología, esta ciencia se centró en el “modelo de la enfermedad”. Es decir, se centraba en encontrar lo que
no funciona bien en las personas; es una de las razones por las que hoy en día
la gente cree que “si vas al psicólogo estás loco”.
Lo que se perseguía con esta mentalidad era medir conceptos como
depresión o alcoholismo, clasificar las enfermedades mentales, entender sus
causas, observar a las personas e identificar qué tenían.
A partir de este modelo, se han desarrollado terapias
psicológicas, medicamentos y se han identificado los tratamientos que funcionan
y los que no. Este modelo de los últimos
60 años se basaba en hacer a la gente infeliz menos infeliz.
Y esto está muy bien, sin embargo ha habido consecuencias negativas:
-Moral: se ha
victimizado demasiado a las personas con problemas psicológicos. Si la persona
tiene un problema psicológico se tiende a creer que es algo que influye de
manera determinante en la vida. Esto mismo ayuda a construir una mala
autoestima en las personas, ya que creen que están condicionados
por sus problemas psicológicos.
-Se olvidó de las
personas sin patologías. ¿Y si existiera una psicología (positiva) que
mejorase la vida de cualquier persona? Aquí es donde entra el campo del
desarrollo y crecimiento personal, el cual se centra en mejorar nuestras habilidades
y alcanzar nuestros objetivos.
-No se hacían
intervenciones para hacer a la gente más feliz. Sólo para solucionar el
problema o enfermedad psicológica.
Entonces, con la psicología
positiva, ¿qué es lo que realmente se persigue diferente al modelo
anterior?
-Preocuparse tanto de
las debilidades como de las fortalezas: no sólo solucionar los problemas
psicológicos, sino ser consciente de nuestras fortalezas y usarlas para nuestro
bien y el de los demás.
-Centrarse en fomentar y construir las mejores cosas de la vida y en reparar las peores.
-Estimular las vidas
de las personas sin patologías y desarrollar sus talentos.
Por tanto, esta nueva
psicología positiva no solo busca solucionar los problemas psicológicos, sino
hacer a la gente más feliz y fomentar su desarrollo.
Y tanto se han esforzado los actuales psicólogos positivos
en construir esta nueva psicología, que se ha hecho una clasificación de fortalezas y virtudes, cómo se construyen y cómo
se obstruye su desarrollo.
La psicología anterior se centraba en estudiar a la gente
con problemas psicológicos y la actual psicología positiva en estudiar qué se necesita para
que la gente sea más feliz.
¿Y cuáles son
estas características de la gente feliz?
-Son muy sociales:
tienen amigos, se llevan bien con su familia, participan en eventos sociales…
-Sienten emociones
positivas: disfrutan de los placeres de la vida.
-Disfrutan del
momento (mindfullness o flujo): es un estado distinto al placer. Un estado
de flujo está caracterizado por sentir que el tiempo no pasa. Para esto te
recomiendo leer sobre mindfullness.
-Dan significado a
sus vidas: conocen cuáles son sus fortalezas y las ponen al servicio de una
misión.
Y algo muy importante que ha descubierto la psicología
positiva es que lo más importante es dar
significado a nuestras vidas y el mindfullness (disfrutar del momento). El
placer y las relaciones sociales solo nos hacen más felices cuando las dos
primeras están cubiertas.
Entonces, lo importante es que la psicología se centre no
solo en estudiar los problemas y solucionarlos, sino en hacer a la gente más feliz.
- Reflexiona e implícate en alguna actividad que de significado a tu vida. Por ejemplo participar en una ONG. Está demostrado que nos hace feliz ayudar a los demás
- Practica el mindfullness en todas las actividades que hagas.
- Construye y cuida tus relaciones sociales. Además de seguir manteniendo tus amigos y llevándote bien con familia o pareja, puedes conocer gente nueva apuntándote a nuevas actividades.
- Participa en actividades que te gusten y con las que sientas placer: deportes, viajes, sexo…
¿Y tú qué opinas? ¿Estás de acuerdo? ¿Crees que esto hace feliz? ¿Qué más añadirías?
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